Separarse a los 50 no es una tragedia, lo que puede ser muy complicado puede ser mantener una situación sentimental o matrimonio mal avenido a partir de los 50 años.
Durante la juventud es común pensar que se tiene toda la vida por delante, pero a los 50 años ya se tiene una edad madura en la que se debe de enfocar qué queremos hacer con nuestra vida pues cada año nos acerca más a la temida idea de la vejez, en la que podemos arrepentirnos de haber llegado acompañados de la persona equivocada.
Por ello, una separación a los 50 no debe de ser algo bueno o malo por el mero hecho de la edad, pues ya no existe edad para los procesos de derecho de familia, para las nuevas parejas, para las rupturas. Cualquier tiempo es bueno para tomar la decisión que se necesita.
Puede ser muy útil analizar qué supone separarse a los 40, lo que nadie te cuenta. En ocasiones no es algo tan encajonado en la edad, sino más bien en relación a la madurez de cada persona en función de su desarrollo vital. Los actuales 50 cada vez dicen que son los antiguos 30 ó 40.
Rehacer tu vida a los 50
Si es posible y cada vez más frecuente casarse a los 50, también es posible separarse a los 50. Ya no hay límites sociales o estereotipo que constriñan nuestra libertad o capacidad de decisión en nuestra vida.
Los condicionamientos siempre existen. Se debe de valorar nuestro estado de salud, capacidad económica, apoyos, necesidades, inquietudes el conjunto de ellos es el que nos lleva a poder separarnos sin importar la edad.
Cada vez son más las parejas y matrimonios que se separan a los 50, 60, 79 y hasta 80 años.
No hay edad para tomar la decisión que necesitamos, una vez separados, comenzará un nuevo periodo en el que deberemos de decidir aquello que queremos, apartando por ello y por elección y descarte aquello que no queremos o antes queríamos pero hemos dejado de querer.
Separarse a los 50 sin trabajo
Un gran problema que puede existir a los 50 años en una separación, es no tener trabajo. Separarse a los 50 sin trabajo puede dar miedo a no poder contar con un medio de vida y por tanto la independencia económica que necesita toda persona para cubrir sus necesidades.
En la actualidad una pareja o matrimonio con trabajo e ingresos a duras penas llega a final de mes, separados los gastos se multiplican con los mismos recursos, la parte que quiera separarse a los 50 años sin trabajo debe de asesorarse, pues es posible que tenga derecho al cobro de una pensión compensatoria.
Separarse a los 50 sin trabajo
Crisis matrimonial a los 50
Un gran problema ante la crisis matrimonial de los 50 es que las personas tienden a sentirse muy jóvenes como para algunas cuestiones, pero a la vez muy mayores para otras.
¿Saben que es lo mejor desde nuestro punto de vista? No considerar que la edad es un elemento a valorar. Cada persona tiene una edad, altura, peso, cualidades… etc por lo que todo tendrá algo bueno y menos bueno. Lo mejor de una crisis matrimonial a los 50 años probablemente será que se cuenta con una experiencia vital muy valiosa que si se sabe utilizar adecuadamente puede ser nuestro gran apoyo.
Contamos con abogados matrimonialistas en Madrid con servicio en proceso amistoso y resolución de dudas en toda España. Asesórese con nosotros o con el abogado de su confianza, pero déjese ayudar antes de tomar una decisión definitiva.
Crisis de pareja a los 50
Lo que hay que evitar a cualquier edad pero muy especialmente a los 50 es caer en una crisis existencial que nos haga echar de nuestra vida a parejas, entorno y seres queridos.
En la crisis de los 50 muchas personas tienden a sentirse incomprendidos. Esa tendencia al aislamiento debe de afrontare, pues es bueno estar solos, pero no excluir de nuestra vida a personas que queremos, pues una pareja no debería de pagar las consecuencias de nuestra situación de crisis, pues en todo caso deberá de ser un apoyo para superarla.